29-11-2007

Archivos o Gestión Documental – ¿problema semántico o cultural?


Una cosa que me llamó la atención en el VII CAM (Congreso de Archivística del Mercosur) es que parece haber
aún una cierta tensión entre el concepto de archivo y el de gestión documental, con una pronunciada tendencia a considerar como "archivo" más bien el archivo histórico o permanente, y que la gestión documental sería todo lo que pasa antes, en la recepción y elaboración documental durante el proceso administrativo de tramitación y que no tendría nada que ver con archivos.

Me extraña un poco esto, ya que desde siempre he tenido un concepto holístico de la archivística y la gestión documental, los considero prácticamente sinónimos, y acostumbro decir que el archivo comienza en la Oficina de Partes y en la creación de las plantillas o modelos que sirven de base a formularios, oficios y otros documentos administrativos, y continúa con la tramitación y las varias fases del resguardo de los documentos a lo largo de todo su ciclo de vida. Distinto es, que cada una de estas fases requiera de métodos específicos de gestión, no necesariamente aplicables al resto.

En su ponencia en la sesión de apertura del VII CAM, doña Antonia Heredia, de España, llegó a afirmar que España era pionera en la adopción reciente de una visión integrada de archivos como parte integrante del ciclo de vida de los documentos, a diferencia del mundo anglosajón en que la gestión documental o records management terminaría en el momento del descarte de los documentos. Otros autores latinos se hacen eco de lo mismo. Cosa que me chocó, porque la realidad es otra.

Aquí pareciera haber un problema de fondo que posiblemente tenga que ver con una dificultad lingüística - lo que demostraría eso de que cuando uno no posee el término cierto, tampoco puede concebir el concepto: En primer lugar, Records, en inglés, es un concepto mucho más amplio que nuestro documento de archivo, e implica todo aquello que constituye prueba, todo aquello que da fe de que que algo pasó - en el fondo, todo aquello que documenta algo. Es record el oficio y la carta, el certificado y la resolución, el contrato y la factura, la radiografía y la ficha clínica, pero también lo es el correo electrónico, la fotografía digital y analógica, el parachoque abollado y con restos de sangre que se presenta como prueba del accidente en la investigación forense sobre un accidente de tránsito, los cilindros de sedimentos que se extraen del fondo de la tierra en la prospección geológica, las bases de datos y mucho, mucho más. Cuando hablo for the record (para el registro)es porque quiero que el periodista documente que yo, fulana de tal, dije tal cosa en tal oportunidad. Cuando hablo off the record (fuera de registro), le estoy entregando información oral que puede ser valiosa para su investigación, pero no quiero que se identifique, que se documente, que fui yo quien lo dijo.

Los records, entonces, hay que administrarlos desde su nacimiento de forma a garantizar que se mantengan inadulterados e íntegros a lo largo de toda su vida útil, que evidentemente, puede ser corta o larga dependiendo de su valor probatorio, por un lado, y de su valor patrimonial histórico y social por otro. Y una vez que los records dejen de tener utilidad directa en el contexto del trabajo de una institución, viene el momento de decidir si se descartan y destruyen como tales, o si merecen conservarse indefinidamente, para lo cual deben transferirse a un archivo de carácter histórico patrimonial que tenga condiciones para seguir manteniéndolos inadulterados e íntegros por el mayor tiempo posible, ojalá siglos.

Ahora bien, así como no hay equivalencia exacta entre record y documento de archivo, así también en inglés los records se definen según los principios archivísticos/administrativos del record keeping, se guardan en los records centers, más o menos equivalentes a nuestros archivos de gestión e intermedios, y se gestionan con los principios del records management, mientras que el término archives, en inglés, implica, por regla general, el archivo de carácter permanente o histórico patrimonial. En muchos casos, la institución madre dueña de los records no realiza la labor de guarda permenente ella misma, por ser oneroso y alejado de su función central. Por eso, en el mundo anglosajón y nórdico es muy común transferir los fondos de conservación permanente a archivos históricos que son organismos externos especializados, estatales o privados, que se encargan de esa labor en beneficio del ciudadano y de la investigación en general.

Para complicar más la cosa conceptual, entramos a las normas ISAG(G) que nacieron como una forma de estandardizar la manera como los diversos archivos históricos del mundo describian sus fondos, estableciendo cuales debían ser los datos mínimos para cada nivel y el orden en que se debían presentar. Comparables a las normas ISBD del mundo bibliográfico, la ISAD(G) no es un conjunto de campos de una base de datos sino que fue concebida en el mundo de la decripción textual manual. Y en los archivos históricos, como centros de acopio del patrimonio documental, lo más común es que se reciban fondos completos, metidos en cajas, de varias entidades a la vez. Por consiguiente, la secuencia de tareas prácticas que hay que realizar es, primero, identificar y aislar cada fondo como un todo, luego tratar de reconstruir el orden y la lógica original de cada fondo en términos generales, y más tarde, cuando haya personal disponible para hacerlo, se procede a describir las secciones y series de las que se compone cada fondo. Luego a seguir – o muchísimo más tarde – y para esto puede pasar muchos años, incluso décadas – alguien tendrá la santa paciencia de dedicarse a inventariar y describir documento por documento el contenido de cada serie dentro de un fondo. La estructura a tres niveles de la ISAD(G) refleja esta lógica.

Cuando el Archivo Nacional de Chile creó su primer formato de base de datos ISIS para comenzar a inventariar sus fondos en computador, echó de menos y tuvo que agregarle campos administrativos y de búsqueda que no estaban contemplados en la ISAD(G), de la misma manera que el formato MARC le agregara campos administrativos y de búsqueda a los campos descriptivos de la ISBD.

Pues bien, algunos colegas han tratado, diligentemente, de aplicar las ISAD(G) a bases de datos de gestión documental administrativa diaria, y se han ido encontrando con que "no sirven", porque no contienen los elementos necesarios para documentar el movimiento, el flujo de trabajo de los documentos a lo largo de su tramitación dentro de la institución, que es tarea fundamental en el proceso de gestión diaria. Crean entonces bases de datos o simples planillas Excel para ir anotando los datos más básicos necesarios para la gestión diaria, que no tienen nada que ver con las ISAD(G) aunque, evidentemente, contengan algunos de sus elementos básicos.

El mérito de los australianos, a los que pareciera que doña Antonia Heredia les tiene alguna bronca, ha sido el de ser los pioneros en concebir y poner en práctica la gestión documental de una forma muchísimo más amplia, integrando, a través de sofisticados sistemas informáticos toda la documentación e información concebible que una organización pueda tener: los records y su tramitación, sean ellos en papel o electrónicos, los informes, la documentación técnica de los procesos de producción, la bibliografía publicada, los manuales, las bases de datos de la contabilidad, de los recursos humanos, salarios y otros, y respetando de principio a fin los principios y normas que rigen para cada área, incluyendo los niveles de acceso por funciones de los usuarios y los niveles de confidencialidad de los documentos. De tal forma que la solicitud que se recibe hoy, el oficio de respuesta y todo el expediente inermedio, en papel, en formato digital o mixto, se registra una única vez, se le aplican las tablas de temporalidad correspondiente y, llegado el momento, lo único que hay que cambiarle a lo largo de su vida es la signatura topográfica para saber donde se encuentra: en el archivo de gestión de mi oficina, en el archivo central de papel, en el repositorio central de documentos electrónicos, o en el archivo histórico de papel o electrónico si es que alguna vez llega a tener el valor patrimonial que lo amerite. Y el sitema captura nuestros correos electrónicos, documentos en word y excel, etc, en el momento de su creación y los integra a un banco de datos que no podemos adulterar.

Me preocupa de sobremanera que en Chile siga existiendo esta brecha tan grande entre la concepción del archivo de papel como una cosa antigua llena de trastes viejos, y el acelerado proceso de llevar al país a la modernidad y al Gobierno Digital. El Proyecto de Modernización del Estado, promovido por la Presidencia, está haciendo cosas muy buenas en muchas áreas, pero no está ni ahí con los archivos, porque los considera una cosa del pasado, que pronto no serán necesarios porque todo se hará electrónicamente. Lo cual no ha ocurrido en ninguna parte del mundo ni va a ocurrir, por un lado porque el papel sigue siendo el soporte más seguro y cómodo de leer, y por otro lado porque tiene que haber continuidad de lógica y ordenamiento entre los archivos de documentos electrónicos y de papel.

Mientras tanto, nuestro Archivo Nacional recién está llegando al punto en que sus técnicos empiezan a convencerse de que podría ser útil escanear documentos antiguos para que la gente los pueda acceder en la Web.

Dos mundos que aún no se encuentran, y entre ellos, en medio de la brecha o en el abismo casi, están los archivos administrativos reales del país, buenos o malos, los archivos posibles, y su ejército de archiveros ad-hoc, auxiliares y administrativos, historiadores y bibliotecarios, muchos con gran amor por la camiseta pero poca o ninguna voz ni eco en las decisiones institucionales.

25-11-2007

VII CAM Primeras Impresiones

(Este artículo se envió el 25.11.2007 a la lista de discusión del Colegio de Bibliotecarios de Chile)

Acaba de terminar en Viña del Mar, Chile, el Séptimo CAM. Para quien se pregunte qué rayos será el "sétimocam", les cuento que se trata del VII Congreso de Archivología del MERCOSUR – bajo el lema: "Archivos : Patrimonio Documental del Futuro".

¡Qué exitazo! ¡Qué belleza! ¡Qué grandioso evento!

Más de 400 participantes, de 17 países, que desde el miércoles 21 al sábado 24 de Noviembre llenaron la platea del Teatro Municipal de Viña en plenarias y mesas redondas por las mañanas, y se distribuían por las salas de conferencia del Hotel O'Higgins, Palacio Carrasco, Corporación Municipal, el DUOC e incluso el Castillo Wulff por las tardes, generosamente intercambiando sus experiencias, sus anhelos y sus preocupaciones sobre las mil facetas de este apasionante quehacer.

Y entre los bastidores, un pequeño pero eficiente ejército de hormiguitas colaboradoras, de la Asociación de Archiveros, el Archivo Histórico Patrimonial y la Municipalidad de Viña del Mar, y Baltazar Turismo, la empresa que se encargó de las inscripciones y reservas de hotel, preocupándose de los detalles, anticipándose a los desastres posibles, y respondiendo a las emergencias que la Ley de Murphy inexorablemente pone en nuestro camino en cualquier actividad.

Hubiera querido dividirme en diez para estar en todas las sesiones al mismo tiempo. Sin embargo, la imposibilidad física de hacerlo, y mi deber profesional de estar donde me correspondía estar, me llamó a restringirme por las tardes a las dos sesiones de la VI Jornada de Archivos Municipales el miércoles (ya que actualmente trabajo en los archivos de la Municipalidad de Valparaíso), y a los ejes temáticos "Legislación y Normalización" el jueves y "Archivos y Represión" el viernes, donde en ambos tuve el honor de moderar. Sólo pude hacer una escapadita a la última sesion del RIBEAU, Red Iberoamericana de Enseñanza Universitaria, en que se debatía el futuro de las mallas curriculares de Archivística y Archivología en la región.

Y como broche de oro, hoy domingo 25, me he dedicado a examinar el CD que nos entregaron el viernes, y me he encontrado con una agradable sorpresa: Salvo escasas excepciones, se trata de los textos completos de las ponencias, más de 140 en total!

Yo me había esperado que nos dieran, como acontece en tantas ocasiones, las simples presentaciones visuales de los expositores, que por más bien hechas que estén, nunca pueden substituir al texto cuando uno no tuvo oportunidad de presenciar la ponencia en vivo y en directo. Pues bien – lo que son las cosas, ¿no? – ¡mi única queja ahora es que también hubiera querido tener las presentaciones! ¡Es que eran tan bonitas! Espero que los organizadores las suban pronto a la página del VII CAM...

Para más información sobre el evento: www.asocarchi.cl y pinchen el botón VII CAM.

¡Gracias a todos los que hisieron posible este evento... y espero poder verlos a todos de nuevo en Montevideo en el VIII CAM en el 2009!

¡Viva el VII CAM!

¡Y se hizo! El 7º Congreso de Archivística del Mercosur se realizó en Viña del Mar, Chile, de 21-24 de Noviembre de 2007. Con más de 400 participantes de 17 nacionalidades, experiencias maravillosas y much@s nuev@s amigos. Me hago el firme propósito de ir escribiendo sobre el VII CAM en los próximos tiempos. ¡Cóbrenmelo!

Por mientras, vean la información oficial en www.asocarchi.cl

Documentos Electrónicos desde una perspectiva archivística

Resumen y reflexiones sobre el seminario internacional
realizado en Santiago 29-31 de Mayo 2007

preparado por
Wenke Adam
wenkeadam@gmail.com



Este documento resume los temas que fueron abordados durante un seminario internacional organizado por el Archivo Nacional y auspiciado por Unesco, y que reunió a más de 100 técnicos representantes de entidades públicas y privadas de todo el país además de especialistas nacionales y extranjeros.

Más información sobre el Seminario, Presentaciones y Resúmenes puede encontrarse en http://www.documentoelectronico.cl y en el portal del Archivo Nacional de Chile.

El tema central del seminario fue el proceso de cambio que se da al pasar de sistemas de tramitación basados en documentos de papel, a los sistemas en que todo el proceso se maneja en formato digital. Esta es una tendencia mundial y una de las metas de modernización impulsada por el Gobierno de Chile, y va acompañado de grandes desafíos para los sistemas administrativos y archivísticos existentes.

Presentaron ponencias representantes de las siguientes entidades: Unesco, Archivo Nacional de Chile, Archivo Nacional de España, Archivo Federal de Brasil, Contraloría General de la República, Proyecto Reforma y Modernización del Estado de la Presidencia. Los expositores hablaron de las experiencias de sus respectivas instituciones en esta área.

Los representantes de Unesco enfatizaron el hecho de que la preservación en el tiempo de los documentos digitales o electrónicos está lejos de estar resuelto y representa un problema mundial: Hoy en día existen documentos en papel con 500 años de antigüedad que se conservan bien, y al mismo tiempo no podemos garantizar que nuestros datos digitales vayan a estar disponibles y legibles dentro de 50 años, debido a la velocidad con que ocurren los cambios tecnológicos. Y cada día, debido a fallas técnicas o errores humanos en la operación de los sistemas, se pierden en el mundo miles de documentos valiosos que sólo existieron en formato electrónico.

Conceptos
Para situarnos en el tema, se definieron algunos conceptos fundamentales. Al hablar de “documentos” en este contexto, se está hablando de lo que en castellano se llama “documentos de archivo” para distinguirlos de cualquier otro tipo de documento físico o digital. Es necesario hacer esta distinción porque no hay un término en castellano que equivalga al concepto inglés de “record”, que cubre los documentos que dan fe de hechos o transacciones legales o financieras.

Documento de archivo
El documento de archivo es todo aquel documento que da fe de que se efectuó una transacción legal, financiera o de otro tipo, independientemente del soporte material en que se encuentra. Es un documento de carácter único, generalmente emitido o certificado por una institución que sirve de ministro de fe. Los documentos de archivo son creados, recibidos y acumulados por las personas y las organizaciones en el transcurso de sus actividades.

Todo documento de archivo, para tener valor legal, presenta las siguientes exigencias:
* Autenticidad
* Fiabilidad
* Integridad
* Disponibilidad

Dado el carácter volátil de los datos digitales, estas condiciones son más difíciles de asegurar en los documentos electrónicos.

Documento electrónico
Es un documento de archivo creado, almacenado y transmitido en formato digital. Para que sea considerado auténtico y legal, debe llevar algún tipo de firma o certificación electrónica.

Archivo
El archivo es parte de los sistemas de administración y de gestión documental de una organización. Tiene que velar por la autenticidad, fiabilidad, integridad y disponibilidad de los documentos de archivo a lo largo de todo su ciclo de vida.

Ciclo de vida
El “ciclo de vida” define para cada tipo de documentos los plazos de conservación, transferencia o eliminación de los mismos. Hay documentos que pierden su valor y utilidad al cabo de poco tiempo y se pueden eliminar; otros pierden gradualmente su valor administrativo pero tienen valor histórico permanente y se deben conservar indefinidamente o transferirse a otras unidades archivísticas pasado su período de utilidad inmediata para la gestión. Para poder manejar un plan coherente de disposición de documentos y efectuar su eliminación o transferencia en los plazos definidos, hay que contar con un sistema de gestión de documentos de archivo.

Gestión de documentos
La gestión documental en las organizaciones consiste en manejar la documentación de archivo con economía y eficacia durante todo su ciclo de vida, incluyendo la tramitación de los documentos recibidos y la elaboración de documentos que se emiten, el ordenamiento y almacenamiento de los documentos según diversos criterios, hasta la conservación de los documentos en los diversos archivos por etapas de acuerdo con sus características y su eventual transferencia o destrucción según su valor.

Sistemas Informatizados de Gestión Archivistica de Documentos (SIGAD)
Son sistemas o aplicaciones computacionales que capturan, clasifican y registran los documentos electrónicos y de papel, controlan el movimiento de los documentos entre las personas, registran los actos legales y administrativos relacionados con ellos, y administran la permanencia, transferencia o destrucción de los documentos en las varias fases de archivo.

Estado actual de los Archivos de la Administración Pública en Chile
En Chile todas las instituciones públicas tienen la obligación de conservar la documentación que reciben y producen. Y la Contraloría tiene disposiciones sobre la eliminación de documentos de diverso tipo: contables, tributarios, previsionales y otros, pasados ciertos plazos.

Hay una Ley de Archivos de 1929 que establece que todos los ministerios deben enviar su documentación al Archivo Nacional pasados 5 años, y las Intendencias, Gobernaciones y Municipalidades, pasados 60 años. Si todas las instituciones que debieran enviar su documentación al Archivo Nacional lo hicieran, no habría capacidad humana ni espacio para recibirla y procesarla. Y el plazo de 60 años es demasiado largo, porque no hay capacidad de conservación local de documentación de valor histórico.

Hay un compromiso de la Presidenta Michelle Bachelet con la DIBAM en el sentido de presentar en un plazo breve, una propuesta de normativa moderna para el sistema nacional de archivos, incluyendo la creación de los Archivos Regionales.

En Chile no existe la carrera de Archivero. Los puestos de dirección y ejecución de los archivos existentes se cubren con personal de las más diversas calificaciones, generalmente sin especialización en el tema. El perfil profesional más cercano es el de Bibliotecólogo, pero la parte archivística de la formación de éstos es muy reducida. En las carreras de administración pública y de gestión e incluso en los cursos de secretariado, el tema de la gestión documental archivística se toca de forma muy superficial.

En general, en las instituciones se usan métodos manuales básicos para registrar el ingreso y controlar el movimiento de documentos en papel durante su fase de gestión directa. Muy pocos han implementado sistemas de gestión documental que les permita ir eliminando lo que ya no sirve y conservando en buenas condiciones lo que tiene valor histórico. Los “archivos” suelen ser meros depósitos donde se acumulan documentos de cualquier tipo, y cuando se llenan los espacios existentes, comienza la degradación indiscriminada del material, independientemente de su valor.

En lo que respecta a los documentos creados en el computador, lo más común es que se impriman en papel y que sea éste el que tiene valor legal, no habiendo ningún sistema de captura o de control de lo que las personas producen y mantienen en sus computadores.

Trámite electrónico

El Gobierno ha avanzado bastante en preparar las normativas necesarias para la legalización de los procesos de Gobierno Electrónico, estando en vigor la firma electrónica y el certificado electrónico entre otros.

Se están multiplicando los casos de trámites que el ciudadano puede iniciar mediante formulario electrónico. Sin embargo, no avanza con la misma rapidez la integración de los procesos digitales con el resto de la administración ni el intercambio e interoperatividad entre entidades diferentes.

Los ejemplos emblemáticos del Servicio de Impuestos Internos y de Chilecompra, como modelos de lo que se puede conseguir interactuando con el público via Web, no se han extendido como se esperaba.

La Contraloría General de la República está terminando su proyecto de trámites en línea, que fue presentado en el Seminario, pero los expositores confesaron que les costó 3 años de intenso trabajo, mucho sacrificio de un gran equipo de especialistas, y más de 10 millones de dólares en financiamiento. Además, indicaron que lo más difícil del proceso fue conseguir el cambio cultural y la aceptación de las nuevas formas de trabajo dentro de la organización.

Se puede decir, entonces, que tanto los archivos de documentos de papel como los archivos de documentos electrónicos en Chile están en una situación de riesgo, ya que por falta de normativas específicas, conocimientos y medios materiales y humanos se suele subestimar la inversión necesaria para:
* organizar adecuadamente lo que existe,
* prepararse para el cambio,
* introducir los métodos modernos de gestión de documentación de archivo y
* garantizar la continuidad de los archivos del “mundo” de papel al “mundo” electrónico.

Estado actual de los Archivos de la Administración Pública en Europa, España y Brasil
Internacionalmente y en Europa se han adoptado en los últimos 10 años una serie de principios, modelos y normas de gestión documental electrónica muy avanzados en términos de la integración, interoperatividad, transparencia ciudadana y seguridad de conservación de los documentos en el tiempo. Estos principios se inspiran en normas que se aplican desde hace muchos años en los países anglosajones y escandinavos, y pueden parecer extraños a los ojos de las culturas latinas.

Los delegados españoles al Seminario hablaron sobre las dificultades que tuvieron para traducir la norma ISO 15489 (la norma internacional sobre cómo hacer gestión de archivos administrativos) al castellano y adaptarla a la lógica de la archivística española. Se reconoce que en general las normas hispanoamericanas han estado dirigidas más hacia la gestión de los archivos históricos que de los administrativos y que los archiveros no siempre están involucrados en la gestión administrativa diaria de los documentos de archivo.

Los brasileños explicaron que la recomendación europea para la implementación de sistemas informatizados de gestión archivística de documentos (el Mo-Req, que se usa para definir criterios de funcionalidad y calidad para las aplicaciones SIGAD), parte del supuesto de que todo el sistema de archivos manual en papel está debidamente organizado, y que sólo falta “pasarlo” al computador. Pero cuando los sistemas manuales no existen, o son insuficientes, como en la mayoría de los países Latinoamericanos, habrá que hacer un gran esfuerzo de organización previa para llegar al punto en que se pueda implementar un sistema informatizado de gestión documental. Los brasileños han incluido en sus recomendaciones instrucciones sobre cómo preparar las condiciones previas mínimas necesarias, sin las cuales el sistema electrónico está condenado al fracaso.

Las siguientes directrices internacionales son de interés para el área:

Norma ISO 15.489-1 Información y Documentación: Gestión de Documentos de Archivo - Norma internacional de 2001, adoptada en España en 2006, que indica la forma más universalmente recomendable de organizar sistemas de gestión de documentos de archivo, sean ellos en papel o electrónicos.

e-Arq Brasil: Modelo de Requisitos para Sistemas Informatizados de Gestión Archivística de Documentos - Recomendaciones para las organizaciones que pretenden introducir un SIGAD: qué hay que hacer antes, qué hay que exigir a los fabricantes o vendedores del software, cómo debe funcionar. Basado en las recomendaciones de Australia, EUA y Europa, adaptado a la realidad de Brasil.

Normativa chilena

DFL-5200 de 10.12.1929 – Ley sobre Archivos, Bibliotecas y Museos – Ministerio de Educación Pública
Circular 28704 de 27.08.1981 – Circular sobre disposiciones y recomendaciones referentes a eliminación de documentos - Contraloría General de la República
LEY-19880 de 25.05.2003 – Establece bases de los procedimientos administrativos que rigen los actos de los órganos de la administración del Estado. Ministerio Secretaría General de la Presidencia
LEY-18845 de 03.11.1989 y DFL-4 de 30.12.1991 – Sobre sistemas de microcopia o micrograbación de documentos – Ministerio de Justicia
LEY-19799 de 12.04.2002 – Ley sobre documentos electrónicos, firma electrónica y servicios de certificación de dicha firma – Ministerio de Economía, Fomento y Reconstrucción
DS-77 de 03.06.2004 – Aprueba norma técnica sobre eficiencia de las comunicaciones electrónicas entre órganos de la administración del Estado y entre éstos y los ciudadanos - Ministerio Secretaría General de la Presidencia
DS-83 de 03.06.2004 – Aprueba norma técnica para los órganos de la administración del Estado sobre la seguridad y confidencialidad de los documentos electrónicos - Ministerio Secretaría General de la Presidencia


Más información sobre el Seminario, Presentaciones y Resúmenes en http://www.documentoelectronico.cl/

Más información sobre Gobierno Electrónico y la normativa del Proyecto de Modernización y Reforma del Estado en http://www.modernizacion.cl